Congresistas piden al Poder Judicial juicio por feminicidio
- La diputada Joanna Felipe (PAN) llamó al Poder Judicial a iniciar de inmediato el juicio en contra de Alan “N”, presunto feminicida de Ana María Serrano que fue recluido desde hace más de dos años.
- Demandan que la valoración de las pruebas se haga con la máxima imparcialidad e independencia, legalidad y perspectiva de género.
Diputadas y diputade de la LXII Legislatura mexiquense llamaron al Poder Judicial del Estado de México a que, cumpliendo con el debido proceso, inicie de inmediato el juicio en contra de Alan “N” por su presunta responsabilidad en el feminicidio de Ana María Serrano Céspedes, cometido el 12 de septiembre de 2023, en Atizapán de Zaragoza.
En sesión deliberante, la diputada Joanna Alejandra Felipe Torres (PAN), a nombre de las y le demandantes, y las comisiones legislativas para las Declaratorias de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres por Feminicidio y Desaparición, y para la Igualdad de Género del Congreso local, solicitó que la valoración de las pruebas se haga con la máxima imparcialidad e independencia, legalidad y perspectiva de género para garantizar la justicia que Ana María y su familia merecen.
Apuntó que han pasado más de dos años desde que el presunto responsable, ex pareja sentimental de la víctima que contaba con sólo 18 años de edad, fue recluido en el centro penitenciario de Tlalnepantla; sin embargo, la justicia para ella y su familia se ha convertido en un laberinto de dilaciones y obstáculos.
La madre de Ana María, refirió, ha denunciado que el inicio del juicio se ha pospuesto al menos por cinco ocasiones y que en octubre pasado fue cancelado dos veces. Esta constante postergación es una forma de violencia institucional, acusó.
Acompañada por la diputada Ruth Salinas Reyes (MC), integrante de la Comisión para las Declaratorias de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres por Feminicidio, la congresista Joanna Felipe señaló que, obstaculizar el ejercicio de los derechos de la víctima a través de la discrecionalidad, es una revictimización, por lo que el calvario que vive esta familia es el mismo que sufren incontables familias a cuyas hijas, hermanas o madres les arrebataron la vida.
Lamentó que la violencia en contra de las mujeres sea una de las violaciones de derechos humanos más graves y arraigados en el mundo.
“Lo más desgarrador es que en la mayoría de estos crímenes el agresor no es un extraño. En 88 por ciento de los casos de feminicidio la víctima conocía al agresor y en seis de cada 10 casos era su pareja o su expareja. El lugar que debería de ser el más seguro, el círculo de confianza se convierte en la mayor amenaza para las mujeres”, acotó.
Tras afirmar que México vive una crisis de impunidad dolorosa, detalló que, de cada 100 delitos que se cometen, sólo nueve se denuncian, y de esos únicamente 5.7 llegan a iniciar una carpeta de investigación. Esto significa que una abrumadora mayoría, el 94.3 por ciento de los delitos queda sin investigar y queda impune. Esta impunidad, acotó, es una herida abierta que erosiona la confianza en las instituciones.
