De pachangas y pandemias
Por: Isaac Ocampo García
(“La verdad os hará libres <Jn. 8:32>,
La mentira creyentes”)
Acerca del coronavirus/ covid-19, hay avisos por todos lados de cómo debemos de comportarnos, de que si no tomamos las precauciones debidas y necesarias, podemos no sólo convertirnos en víctimas de esta pandemia, sino incluso ser portadores y contagiar a otras personas. No obstante ello, repito, hay mucha inconciencia en la gente. Andan por la calle sin el cubre-bocas, arman fiestecitas y fiestones a cualquier hora, en donde se reúnen muchas personas de todas las edades.
Ya lo han dicho, especialistas médicos extranjeros, que si los mexicanos no cuidamos el asunto éste, México puede convertirse en “foco” o “centro” de una próxima pandemia. Podría ser la “recaída” del coronavirus/ Covid-19, u otra situación; incluso de espanto.
Grave la situación de muchas personas. Como la de don Félix, el señor que atiende una de las carnicerías de la Colonia, Emiliano Zapata, en Zinacantepec, México. Quien padece de “Cardiopatía Esquiémica”, que aunque es atendido por el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), hace poco por ejemplo, tuvo que solventar una operación del corazón, que le costó en este instituto, 100 mil pesos, pero que de manera particular, dice don Félix, le hubiera costado 700 mil pesos. Don Félix dice, que a duras penas la va llevando con los gastos de la familia. Sigue con la venta de carne y embutidos, como la longaniza; y los días viernes, vende tacos, pero para llevar; nada de sentarse como antes, a degustar los ricos tacos de costilla. Nada más es de pensar en la gente que no tiene con qué solventar un gasto como el que hizo don Félix.
Ah, pero no falta que en la misma colonia, gente, sobre todo venida del sur del estado, que seguido arma tremendos fiestones, que inician desde muy temprano y terminan a horas de la madrugada, obvio, del siguiente día. ¿Cuánta gente convive en estos jolgorios? Bastante, y sin ningún tipo de cuidados; total, ellos le dan rienda suelta a sus delirios pachangueros, y si por ejemplo, alguien les dice o les comenta lo del coronavirus, o del Covid-19; nada: cual más de ellos le contestan que eso no existe, que es puro invento de las autoridades. En el último de los casos, se encomiendan dizque a sus santos o; al “Hay Dios dirá”.
Sería cuanto, por el día de hoy.
Nos leemos en la que sigue, digo; si es que…