GOBERNADOR, “CHAMAQUEADO” POR “SU” SECRETARIO GENERAL

Por Juan Miguel Benítez Meléndez 

TOLUCA, México. No se le puede negar su dilatada experiencia en las “entretelas” de la administración pública, en el Estado de México, habida cuenta que aprendió, con disciplinada “institucionalidad”, — cuando era parte de un “equipo”, — todas y cada una de las “normas” que su maestro impuso en la dependencia donde ahora es el titular, como tampoco se le puede escatimar su “influencia”, en las decisiones que toma el Jefe del Ejecutivo Estatal, respecto de los grandes problemas que aquejan a todos los mexiquenses. Su esfera de competencia la amplió para “participar” en las postulaciones del PRI mexiquense en los comicios recientes, tarea, en la aplicó toda la “fuerza del Estado”, para “colocar” a los candidatos que le ¿eran? afines, — incluido su hijo, — con los resultados que todos conocemos. Discreto, “operando” desde la Secretaría General de Gobierno, del GEM, su oficina; tiene armada toda una red de promotores informantes, que le “evitan”, al Gobernador de los Mexiquenses, desagradables escenas públicas con sus gobernados y lo mantiene en una burbuja de “tranquilidad social”, inexpugnable para el ciudadano común. Su paso por la alcaldía de la capital mexiquense, le “autorizo” a poner en práctica todos los “edilicios” recursos de operación municipal, que si bien funcionaron en su época, en ésta le fallaron todas, con las consecuencias, — carísimas por cierto, para los contribuyentes, — que está “pagando” el profesor, cuya reputación magisterial, política y personal, está un “poquito” más abajo del bache más hondo, en cualquier vialidad de la capital mexiquense, mientras nuestro personaje sigue en su sitio. Camaleónico ha sido su comportamiento público estos años, ha sorteado, las buenas, las malas y las peores, tanto en su entorno profesional, como en lo político, toda la “experiencia acumulada”, que tiene nuestro personaje la está aplicando para que el Gobernador de los Mexiquenses, transite su gestión, sin sobresaltos a extremo tal que pese a la atonía gubernamental que impera, todo “el mundo estatal”, mantenga un clima de “seguridad” civil, que estamos muy lejos de lograr. Severos problemas financieros, documentadas querellas laborales contra los Ayuntamientos; dolosos los crímenes, — un día sí y el otro también, — de los que dan cuenta los medios, en fin, todo se “guarda”, en la oficina a su cargo y oculta la realidad de la entidad, al Gobernador de los Mexiquenses.