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Se llevó a cabo el conversatorio Voces femeninas de la poesía, en el marco de la FILEM 2025

•          Zel Cabrera y Roxana Elvridge-Thomas coincidieron en la necesidad de seguir creando desde los márgenes y hacer visible el legado intelectual y artístico de las mujeres.

Toluca, Méx. – 11 de octubre de 2025. Con el objetivo de dialogar sobre el papel de la mujer en la literatura y su legado cultural, se llevó a cabo el conversatorio Voces femeninas de la poesía, entre las escritoras Zel Cabrera y Roxana Elvridge-Thomas, en el marco de la Feria Internacional del Libro Estado de México (FILEM) 2025.

La escritora y periodista Zel Cabrera presentó Mediocres, poemario de su autoría, “una obra que surgió como un acto de resistencia ante las narrativas dominantes que buscan silenciar a los cuerpos y las subjetividades femeninas”. Con un lenguaje crudo, íntimo y radicalmente honesto, Cabrera confronta las nociones tradicionales de éxito y excelencia impuestas a las mujeres.

“El título, Mediocres, funciona como una crítica directa a las exigencias sociales que invalidan otras formas de ser, pensar y habitar el mundo. La mediocridad aquí no es incapacidad, sino un acto de resistencia frente a un sistema que valora a las mujeres solo en función de su productividad y perfección”, explicó.

Por su parte, la autora Roxana Elvridge-Thomas expuso que su obra Shamhat, las magníficas está inspirada en la figura de Shamhat, la sacerdotisa sumeria que civiliza a Enkidú en la epopeya de Gilgamesh, con lo cual traza un recorrido que conecta a diosas antiguas con figuras emblemáticas de la literatura mexicana como Sor Juana Inés de la Cruz, hasta llegar a autoras contemporáneas como Carmen Báez Carrillo.

“Es un ensayo literario que entrelaza mito, historia y crítica cultural para reivindicar la presencia transformadora de las mujeres en la escritura a lo largo de los siglos, porque hay muchos estudios de poetas y literatos hombres, pero sobre mujeres hay muy pocos y hay que darles su lugar”, indicó.

Durante el conversatorio, ambas escritoras coincidieron en la necesidad de seguir creando desde los márgenes y hacer visible el legado intelectual y artístico de las mujeres. En un diálogo que transitó entre la poesía, el ensayo y la historia se destacaron las formas en que, incluso en espacios de reclusión o exclusión, como el hogar o el convento, las mujeres han producido pensamiento y arte.